Las labores altruistas de Alfonso Roldán lograron desplazar al quehacer del médico preocupado en la prevención de enfermedades, del articulista con larga carrera de colaboraciones en revistas internacionales. Dirige desde su pequeño despacho en el Paseo de la Castellana de Madrid la “London Diplomatic Academy” en nuestro país, así como la Asociación de Amigos de las Naciones Unidas.
Trabaja intensamente para que España vuelva a contar con la Delegación Oficial de ONU que en su día dispuso y hoy carece. Con limitación de personal, medios e infraestructura, se ven en la necesidad de ejercer hoy en día como sede oficiosa la organización supranacional.
La Asociación de Amigos desempeña también un papel de enlace entre las instituciones, las asociaciones y el conjunto de la sociedad civil con la Oficina de la ONU en Bruselas desde hace ya cuatro años. Adscrita a la Agencia Española de Cooperación Internacional como organización para el desarrollo, la Asociación trabaja desde la educación y la cooperación para mantener la paz, el desarrollo y la divulgación de los derechos humanos. Sin significarse por etiquetas, colores o partidos, agrupa a gentes de todas las ideas y procedencias que comparten sus fines.
Su presidente es un convencido de la necesidad de un mayor equilibrio multilateral en el macro organismo con sede en Nueva York. Es consciente de que ésta es una carrera a largo plazo, pero él es un corredor de fondo. Así nos lo ha hecho saber en la entrevista que nos ha concedido a la Fundación la Asociación de Amigos de las Naciones Unidas tiene en nuestro país delegaciones en Almería, Cádiz, Salamanca, Cuenca, Badajoz, Lugo, Islas Baleares, Las Palmas, Guipúzcoa, Vizcaya y Madrid.
¿Cuáles son los grandes retos que afronta Baan Ki Moon?
Baan Ki Moon tiene hoy por hoy un presupuesto concreto y un cauce muy marcado. Suponemos que habrá continuidad con respecto a Kofi Annan. El gran problema que afronta es la financiación. Hay que adelgazar el elefante que reúne a 191 países.
¿Qué futuro augura a las Naciones Unidas?
Es imprescindible este organismo supranacional que armoniza a las diferentes naciones e intenta poner orden y concierto entre ellas.
Las Naciones Unidas es un organismo insustituible a la vista de la labor que desarrolla en tantos ámbitos como la infancia, la mujer, la paz, la seguridad, el desarrollo… Los grandes cambios que todos anhelamos en el seno de las Naciones Unidas no se van a operar de un día para otro. Esta es una tarea largo plazo.
¿Cuáles son esos cambios imprescindibles?
Ninguno de los 191 estados miembros se atreve a poner en duda la necesidad de reforzar el papel de la institución de las Naciones Unidas.
Es necesario garantizar la representación de todos los pueblos y replantear la composición del Consejo de Seguridad. Las decisiones de la Asamblea de la ONU no son vinculantes, mientras que sí lo son las del Consejo de Seguridad, de ahí su importancia.
Es necesario abrir el Consejo para que el tenga solvencia en las decisiones que tome. Confío en esa gradual apertura, pero un equilibrio en el que estén representados todos los países aún está lejano. La reorganización de agencias y programa es también una reforma necesaria.
¿El poder en el Consejo está directamente relacionado con el aporte económico de las grandes potencias?
Así es. El 32 % del presupuesto de las Naciones Unidas lo cubren los EEUU. Como no llegan al 35% que les corresponde, después de una larga negociación, se decidió que el 3 % que EEUU no quería pagar lo aportara la Fundación de las Naciones Unidas, que promueve el magnate de la comunicación Ted Turner, dueño de la cadena de televisión CNN.
No salen de números rojos…
Las dificultades que en este momento tiene la ONU son debidas a las tensiones de tesorería que genera el retraso de EEUU en el pago de su cuota, que se llega a atrasar hasta tres y cuatro años. Los entes económicos dependientes de la ONU como el Banco Mundial, FMI etc. no pueden por ley adelantar fondos por lo que, en ocasiones, se adelantan de los fondos destinados a las misiones de paz.
¿Qué me dice de Irak? ¿Hizo la ONU todo lo que pudo?
Los funcionarios sí. A los inspectores de las Naciones Unidas no se les permitió terminar allí su trabajo, por más que solicitaron tiempo para acabarlo. El Premio Nobel de la Agencia de Energía Atómica fue un reconocimiento implícito al trabajo de la ONU para evitar una guerra aberrante e injusta.
¿Qué labor desarrollaba la Oficina permanente de las Naciones Unidas en Madrid?
Durante catorce años, y de forma ininterrumpida hasta su cierre en Diciembre del 2004, fue la puerta natural de las Naciones Unidas en nuestro país. Llegó a tener siete funcionarios. Estos los remuneraba la Secretaría General, mientras que el local y los gastos los asumía la Administración del Estado. El cierre vino dado por razones presupuestarias en un momento de particular dificultad. Entonces se decidió concentrar en Bruselas las Oficinas europeas.
Actualmente el único puente de comunicación directo que une a la sociedad civil española y a la ONU está en la capital belga.
¿Cómo les afecta esa carencia de Oficina permanente?
Ante los medios de comunicación nos toca muchas veces suplir la carencia de la Oficina. Nos ha tocado cubrir un hueco para el que no nacimos, ni estamos preparados, ni tenemos capacidad económica. Estamos sirviendo también de puente para la gente que se quiere relacionar con las Naciones Unidas.
En ese sentido realizamos actos y campañas de sensibilización, charlas en los centros escolares, cursos de formación para conocer el funcionamiento interno de las Naciones Unidas, cursos de verano en el Escorial… Editamos también una revista junto con “London Diplomatic Academy”.
¿Qué perspectivas hay de reapertura de la Oficina permanente?
Hemos hecho gestiones a todos los niveles posibles: Secretaría General de Nueva York, Administración del Estado, Ministerio de Asuntos Exteriores, Ayuntamiento de Madrid, Comunidad de Madrid… Algunos me dieron buenas palabras, pero otros ni eso.
No obstante, hay que subrayar el compromiso de España con las Naciones Unidas. Acaba e hacer una aportación muy importante de 750 millones de euros al PNUD. Es una pena que no se destine una parte siquiera una pequeña al mantenimiento de esta Oficina.
¿Como acercar a la ciudadanía las Naciones Unidas?
Hay países como Francia o Suiza en los que se vive el diario acontecer de las Naciones Unidas. En España no ocurre eso, tenemos una pobre conciencia del organismo. Sería muy positivo en nuestro país un programa semejante al de “Diplomacia” de la CNN en los domingos. Esta emisión semanal en una de las televisiones públicas con el día a día de lo que acontece en la ONU podría abrir muchas conciencias.
Objetivos de la Asociación:
– Divulgar los objetivos y principios de Naciones Unidas contenidos en su Carta fundacional e igualmente de sus agencias especializadas y programas en todas las Comunidades Autónomas, regiones y pueblos de España, con especial énfasis en las asociaciones y organizaciones no gubernamentales relacionadas con los objetivos de Naciones Unidas, sin distinción de nacionalidad, sexo, raza o creencias religiosas de sus miembros.
– Promover la relación de personas físicas y jurídicas con Naciones Unidas y especialmente con el Centro de Información de Naciones Unidas en España, oficinas, agencias y otras entidades de la misma establecidas en España.
– Informar y formar al público en general sobre los programas e iniciativas de Naciones Unidas. Conectar a individuos, organizaciones no gubernamentales y otras asociaciones con las instituciones dependientes de Naciones Unidas.
– Animar a las personas físicas y jurídicas a conocer los esfuerzos Naciones Unidas e inspirarles en la búsqueda de sus objetivos, dedicados a reforzar participación de los españoles en el sistema de las Naciones Unidas y a fortalecer ese sistema de relaciones. La agenda de acción de ANUES combina educación, investigación, análisis de la política sustantiva y promoción del diálogo en Naciones Unidas.
– Promover los movimientos por la Paz y la concordia de todos los ciudadanos y organizaciones españolas entre sí y con otras organizaciones internacionales.
– Promoción de cursos en España del denominado «United Nations System», como foro de difusión del sistema de Naciones Unidas en la resolución de conflictos, y del denominado «Global Compact», para favorecer el compromiso ético de las empresas con los principios de Naciones Unidas.
La Redacción