Por Leticia Martínez Carnicero, voluntaria en Calcuta
Piensa en un abrazo, pero no en un abrazo cualquiera, piensa en un abrazo de un ser querido, en el que por unos instantes el tiempo se paraliza y te encantaría que fuera eterno, piensa en esa sensación…Esa sensación es Colores de Calcuta, desde que llegas hasta que te vas, poco a poco el abrazo se va haciendo más intenso y te gustaría que no se acabara nunca.
Calcuta, una ciudad diferente, muy diferente, tan diferente que aunque te la quieras imaginar, hasta que no estás allí no sabes como es… Antes de ir me dijeron que Calcuta entraba por los cinco sentidos, no lo entendí hasta que llegué allí, mis sentidos se dispararon y entonces viví Calcuta.