Dando, recibimos. Si desdeñamos los objetos, recibimos la vestimenta celestial. Audazmente levanta tu escudo. Sólo te pido: que el oro no debilite tu fuerza. A Mi Enseñanza no le agrada el oro.

(VI, 9, 11- Leaves of Morya’s Garden, II, Illumination (Las Hojas del Jardín de Morya II, Iluminación), 1925, Agni Yoga