«La espiritualidad no consiste en descuidar el cuerpo físico, sino en tratar de liberarlo de todas las impurezas que se han acumulado en él y que impiden al espíritu manifestarse a través de él.
¿Qué es la enseñanza de la Fraternidad Blanca Universal? Precisamente una enseñanza que da unos métodos referentes a la regeneración del cuerpo físico. Así pues, los actos más naturales, más cotidianos e indispensables para la vida, cómo respirar, comer, beber, lavarse, andar, dormir, pueden todos convertirse en ocasiones para hacer este trabajo de regeneración. Ésta es toda una ciencia que la mayoría de aquellos que se llaman espiritualistas no conocen, y que supone para ellos tantas complicaciones, anomalías y desequilibrios. Y no sólo para ellos, sino también para los materialistas que no saben que este cuerpo físico que cuidan tanto, ha sido dado al hombre para que haga de él un instrumento del espíritu. «
Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86). “Pensamientos cotidianos”, Editorial Prosveta