Venimos denunciando el gasto de armamento en el mundo. Hoy, día Internacional de la Paz de Naciones Unidas, el Financial Times abre a cinco columnas señalando que los países del Golfo están comprando a Estados Unidos material armamentístico por importe de 123.000 millones de dólares.

Señala este periódico: “Los países de Medio Oriente temen que un posible ataque israelí o estadounidense sobre las plantas nucleares iraníes pudiera provocar una represalia”. Como bien se deduce de este comentario, en esta venta hay una “venta de miedo”. Nos parece siempre oportuno recordar que John Keneth Galbraith, en su etapa de embajador de Estados Unidos en India, atribuyó la causa de la guerra de 1965 entre India y Pakistán a la venta por parte de Estados Unidos de aviones de combate a Pakistán, venta que, digamos coloquialmente, “puso nerviosa a la India”.

A la fecha las guerras de Irak y Afganistán han costado a Estados Unidos 746.000 millones y 332.000 millones de dólares, respectivamente. El superplan de infraestructuras propuesto por Obama asciende a 50.000 millones de dólares (equivalente a sólo el 4,6% de lo que Estados Unidos lleva gastado en Irak y Afganistán), serviría para convertir a Estados Unidos el país mejor equipado del mundo. ¿Cuántos colegios, universidades, carreteras, hospitales, hoteles, aeropuertos, cuánta educación…  podrían haberse construido con ese dinero dilapidado en Irak y Afganistán?

http://costofwar.com/

Es importante tener siempre estos datos presentes en la cabeza para rebatir a aquellos que insisten que la política del miedo, la realpolitik, es la única posible. Alemania está estudiando disminuir su ejército de 250.000 a 160.000 soldados y otros países empiezan a pensar en planteamientos similares.

Nos parece que el mundo debe ir por ahí y no por el continuar armándose como piensa Estados Unidos.

Con el afecto de siempre,