A menudo la mañana es brumosa y el frío penetra hasta el corazón.
Pero tú sabes que la felicidad llega.
Que el fuego de la conciencia del futuro te anime.
El crepúsculo no perdurará.
Si, en verdad y ciertamente.
Tremendo es el furor de la batalla.
El oído discierne claramente el rumor de las pisadas.
Si, en verdad y ciertamente.
¡Sed imbuidos por la fuerza!
Las Hojas del Jardín de Morya I, La Llamada, 1924, Agni Yoga Society, Nueva York