La Cábala dice que el Año Nuevo está influenciado por las estrellas. El nacimiento de un año se parece al nacimiento de un niño. Es el nacimiento de una vida que va a durar un año. Cuando nace un niño, se hace un horóscopo según el día y la hora de su nacimiento para determinar el desarrollo de los acontecimientos que ocurrirán en su vida. Lo mismo ocurre para el año, y hay que saber que el primer día va a determinar el primer mes, el segundo día el segundo mes, el tercer día el tercer mes y así sucesivamente. Por consiguiente hay que vivir, pensar, sentir y comportarse correctamente por lo menos durante los doce primeros días para establece un base inteligente, luminosa, gracias a la cual los doce meses del año quedarán influenciados, determinados por el bien.
Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86), EL AÑO NUEVO. Ediciones Prosveta