El pensamiento de hoy es muy gráfico.

Enlaza con lo que se ha hablado en el encuentro de Toledo este fin de semana: rescatar el Yo superior, contactar el alma.

Con frecuencia el diamante interior está oculto por el polvo, sin brillo, muerto. Allí yace una divinidad desactivada.

Pero cuando limpiamos el interior hacemos sitio para algo muy elevado.

La Teosofía habla de la reaparición del Cristo. Algunos entienden esta reaparición en el sentido de que el principio crístico habitará cada vez más y más corazones según la humanidad vaya despertando del sueño o maya.

El entorno y la inercia nos alejan de ese reencuentro. Por eso hay que trabajar en ello.

Al poco de trabajar en ello, se convierte en un encuentro gozoso, en el mayor tesoro.

Por eso los que están en ese encuentro tienen la mirada calmada y hermosa.

Ese encuentro llama a todos y cuanto antes acudamos, más podremos servir.

No basta con abandonarse a un vago impulso místico para atraer a la Divinidad. Cuando uno se abandona, es pasivo, entonces no es seguro que reciba la Divinidad, sino más bien a unos espíritus tenebrosos que, viendo allí un ignorante sin protección y abierto a todos los vientos, se alegran de hallar un lugar donde instalarse.

Cualquier cosa que deseéis emprender, debéis comenzar preparando las condiciones. Cuando debéis verter un líquido, leche por ejemplo, en un recipiente, miráis que éste esté limpio; y si está sucio, lo laváis. Y vosotros mismos, si os parecéis a un recipiente sucio, ¿creéis que el Espíritu Santo vendrá a instalar su morada en vosotros? Los que vendrán serán entidades tenebrosas, impuras, porque se sentirán atraídas por el alimento que está ahí en vosotros en forma de pasiones, instintos mal dominados. Evidentemente, puede venir el Espíritu Santo, pero sólo el día en que le hayáis preparado, a fuerza de trabajo, un habitáculo aceptable para él.

Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86). Pensamientos cotidianos. Su obra está publicada en España por la Asociación Prosveta Española- www.prosveta.es. Foto: transeuntes  en las afueras de Ahmedabad, Gujarat, India, 3 mayo 2009