Hoy se nos habla del trabajo creador, el único que conduce a la victoria.
Es la sagrada palabra del trabajo, y no sólo nos referimos al que nos procura el sustento.
El trabajo con nuestro pensamiento, con nuestros silencios, con nuestras palabras y con nuestras manos para elevar nuestra forma de vivir.
Lo viejo ya no sirve, se nos dice, pero lo nuevo es difícil.
Llevamos un Escudo, que equivale a una responsabilidad. Hay que protegerlo.
No debemos engañarnos ni demorarnos demasiado en el camino.
Hay un trabajo a hacer. Y podemos y debemos hacerlo con la mayor alegría. La ventisca es pasajera.
Aprended a custodiar el Escudo.
Sed ingeniosos en vuestros logros.
Lo nuevo es difícil, y lo viejo, inapropiado.
Las nubes no deben ocultar las montañas.
Ni las excusas ni las evasiones ayudarán.
Sólo la labor creativa conduce a la victoria.
Comprended la labor en sentido amplio.
La ventisca ciega la vista, mas no al espíritu.
Las hojas del jardín de Morya, sutra 340, 1924 Agni Yoga Society, Nueva York. Foto: familiares en la fiesta de fin de curso de Anand Bhavan, a finales de abril de 2010