Se nos invita a dar lo mejor nuestro, en cada pensamiento y en cada conducta.

Se nos invita a ser luminosos, irradiando calor y luz, como el sol.


Se nos invita a mirar adelante, sin atascarnos en las rencillas y en las querellas del pasado.

A inaugurar nuestro mundo cada mañana, desde la mayor pureza.

Un cuaderno limpio cada día.

Nos conferirán el poder y la celeridad de Mercurio, se nos dice.

Se nos ofrece el milagro, cada día, de experimentar el néctar de la Unión.

El milagro de la Belleza en el adorno
        de nuestras vidas cotidianas exaltará a la humanidad.
    Levantad bien alta vuestra luz.
    Iluminad las bellezas de Mi Templo.
    Enseñad el Gozo de la Belleza.
    Enseñad la Felicidad de la Sabiduría.
    Enseñad la Bienaventuranza del Amor.
    Enseñad la Gloria de la Unidad con Dios.
    Os conferiré el poder y la celeridad de Mercurio.
    Avanzad sin dudas, sin temor, sin volver la vista atrás.

Las Hojas del Jardín de Morya I, La Llamada) sutra 45 (1924), Agni Yoga Society, Nueva York. Imagen: Pintura de Diane Harvey, Sedona, Arizona