Nos envían ciertas ondas vibratorias.
Son como mapas en la noche oscura.
Se nos pide que estemos atentos para captarlas, y que desechemos los pensamientos triviales.
El pensamiento trivial no añade, y ahora es momento de añadir.
Nuestra mente puede estar en un estado de conexión superior: en ese caso será sensible a esas vibraciones.
Las vibraciones nos transmiten verdades antiguas, profundas. Sobre cómo vivir en armonía con lo que realmente somos.
Captémoslas, para incorporar esas verdades a nuestras vidas allá donde nos toque estar.
Escarpado es el sendero hacia la morada de la fe.
Volved la mente hacia el gozo de la creación,
De modo que podáis exaltar el espíritu,
desechad todo pensamiento trivial y aprestaos
a recibir las ondas vibratorias enviadas por Nosotros.
Las hojas del Jardín de Morya, La llamada, sutra 19, 1924 Agni Yoga Society, Nueva York. Foto: niña y su maestra en la residencia de Anand Bhavan, en Howrah, Calcuta