Portando la lanza de la vida, respiramos sonrientes
el éter vivificador del sol.
Empuñad vuestra lanza al amanecer y conducid vuestros corceles matinales
hacia el abrasador mediodía de la vida.
Y los lirios florecerán sobre las piedras.
Y, al despuntar el primer rayo, abrid de par en par
la puerta de vuestro aposento,
Y los pájaros cantarán en alabanza de la labor.
Aprended la Sabiduría del Creador a través de los símbolos de la vida.
Aquellos que cumplen su aceptada misión
desenmascaran el hecho de la vida terrena,
Y comprenden el verdadero significado de su propio sendero.
Las hojas del jardín de Morya, La llamada, sutra 14, Agni Yoga, 1924. Imagen: pintura de Nicholas Roerich, “Signs of Christ”, 1924