«No esperéis al Reino de Dios como una organización política o social que va a venir a imponerse en la tierra. El Reino de Dios es primero un estado de conciencia, una forma de vivir y de trabajar. Por esto no puede ser realizado en el plano físico antes de ser previamente realizado en el pensamiento. Una vez realizado en el pensamiento, descenderá hasta el corazón, hasta los sentimientos, y sólo entonces podrá manifestarse mediante actos. Porque este es el proceso de realización en la materia: pensamiento – sentimiento – acto.
El Reino de Dios se realizará un día en la tierra, pero antes debe venir en los pensamientos y los sentimientos de los humanos. Y ahí podemos ver que el proceso ya ha comenzado… Miles de hombres y mujeres en el mundo alimentan en ellos el ideal y el amor del Reino de Dios, y existen muchos más de los que creéis. En su comportamiento, en su forma de vivir, en algunos de ellos el Reino de Dios ya se ha realizado; e incluso si no los conocemos, es con ellos con quienes trabajamos.»
Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86). Pensamientos cotidianos, Editorial Prosveta. Imagen: pintura de Nicholas Roerich, “Padma Shambava” (1924)