«Permanecer constantemente cerca de los humanos, no es la mejor forma de ayudarles. Si verdaderamente queréis ayudar a los demás, debéis habituaros a alejaros un poco de ellos durante algún tiempo. Ahora bien: no se trata de dejarles para irse a cualquier parte. Si abandonáis a vuestros padres, a vuestros amigos, es para elevaros, para ascender a fin de recoger riquezas que luego podréis distribuir a vuestro alrededor. ¿Cómo un hombre pobre, débil, ignorante, puede ayudar a los demás? No puede, y si a pesar de todo lo intenta, sólo consigue crear trastornos y agitación a su alrededor. El único método de ayudar a los seres, es el de irse, de vez en cuando, hacia la patria celeste y volver para distribuir las riquezas que habréis recogido.»

Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86). Pensamientos cotidianos, Editorial Prosveta. Imagen: playa de Badalona, 13 diciembre 2017 (cortesía de Carmen Torres)