”A medida que recorre el Camino, el Peregrino debe tener el oído atento, la mano dadivosa, la lengua silenciosa, el corazón puro, la voz aúrea, el pie rápido y el ojo abierto que ve la Luz. Él sabe que no camina solo. ”

Sirviendo a la humanidad, Alice A. Bailey y M. Djwahl Khul (1972), p.532, versión en español de Editorial Nous (2012). Imagen: “Philosopher. Silence”, pintura de Nicolas Roerich (1940)