«Si sabemos cómo mirar al sol y trabajar con él, adquirimos el verdadero poder. Todo lo que existe en la tierra, las piedras, las plantas, los animales y los hombres, reciben la vida del sol, su calor, su luz; pero solo los grandes Maestros y los Iniciados han comprendido la naturaleza de esta energía: han desarrollado los centros que les permiten captarla y transformarla.
Para un Iniciado, la luz del sol es un alimento, la absorbe, la asimila para proyectarla después alrededor de él. Por eso puede iluminar, calentar y vivificar a las criaturas.»
Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86), Pensamientos cotidianos, Editorial Prosveta. Imagen: el Pirineo en Ribagorza, Huesca, 21 mayo 2022. cortesía de Carlos Bravo Suárez.