«En el plano físico todos estamos más o menos protegidos y sabemos cómo protegernos. Pero psíquicamente, es otra cosa. Muy pocas personas son conscientes de que la atmósfera que les rodea, está atravesada por corrientes oscuras producidas por todo aquello que emana de negativo del psiquismo de los humanos: ira, rebelión, envidia, odio, deseo de venganza, etc… y esas corrientes alimentan a las entidades maléficas que pueblan el espacio.

Todos estamos expuestos a esas corrientes. Entonces, ¿cómo protegernos? Empezando por vigilar nuestros propios pensamientos, nuestros propios sentimientos y nuestros propios deseos, volviéndolos cada día más justos, más nobles y más desinteresados, con el fin de que solo sirvan de alimento a las entidades luminosas. De este modo creamos todas las condiciones favorables para la llegada de esas entidades; serán ellas las que nos cuidarán y nos protegerán.»

Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86), «Pensamientos cotidianos», Editorial Prosveta Imagen: Via de Piamont, Valle de Haute Bearn (Francia), 17 de octubre de 2019 (cortesía de Fuego Camina Conmigo)