«La Ciencia iniciática os aporta nuevos conocimientos; pero si no vivís en armonía con las leyes divinas, estos conocimientos os abandonarán. Vivir en armonía con las leyes divinas, es poseer la verdadera ciencia de la vida. En ese momento precisamente, el saber eterno, universal, cósmico, se instala en vosotros, y cada día hacéis nuevos descubrimientos, nuevas luces se encienden en vosotros.
Este saber, ya lo poseéis, siempre lo habéis poseído, pero está tan profundamente escondido en vosotros, que difícilmente podéis tomar conciencia de él. Solo la vida armoniosa, la vida divina, puede hacerlo aparecer a la superficie; mejor que ninguna lectura, es esta vida la que os hará conocer lo esencial. Por ello, no contéis con vuestros conocimientos librescos: si no vivís en armonía con el Cielo, todo se borrará, todo os abandonará; incluso vuestros dones y vuestras facultades os abandonarán. Armonizaros solo con el mundo divino, y descubriréis el verdadero saber, un saber que nunca os abandonará.»
Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86), Pensamientos cotidianos, Editorial Prosveta. Imagen: Camino a Finisterre: entre Negreira y Olveiroa, 29 junio 2018