«Es curioso: lo que nos gastamos aquí unas cuantas personas para cenar en un par de ocasiones, basta para cambiar la vida de algunos niños indios. Quizá no sean necesarias grandes decisiones políticas para transformar el mundo, sino pequeños gestos de los ciudadanos. Sostenidos, profundos, coherentes, pero pequeños gestos al fin».

Hernán Zin, La Libertad del Compromiso (2005, Plaza & Janés), p. 39