Esther, interna del Centro Penitenciario de Brieva (Avila) nos ha pedido que publiquemos este poema que ha escrito. Lo hacemos con los mejores deseos para Esther.

Cada vez que me miras,
Me pongo a temblar,
Me entran taquicardias
Y no puedo respirar.


Cada vez que me hablas
Me pongo a tartamudear
Se me cruzan las palabras
Y no puedo ni pensar.

Me imagino tus caricias
Y tu forma de besar
Tus manos sobre mi cuerpo
No me puedo concentrar.

No me puedo concentrar
Al escribirte una poesía
No te dejo de pensar
Ni de noche ni de día.

No quiero que pase el tiempo,
Cuando estoy cerca de ti,
Despiertas mis sentimientos
Solamente estando aquí.

Y por eso vida mía
Yo te dedico este verso
Porque no puedo mirarte
Y decirte lo que siento.