«Mantengamos en silencio la mente, alertemos nuestra atención, y permanezcamos en comunión con aquella flor, aquel arbusto o aquel animal. La comunión es muy superior a la comunicación y permite la comprensión absoluta y el verdadero amor. Abramos los ojos. En los hombres, en los niños, en los animales, en las plantas, en todo hay una parte de verdad y de todo podemos aprender.»
Ramiro Calle, “El Cielo en la Tierra” (2007). Imagen: «To Kailas. Lahul», 1932, Nicholas Roerich